Anker Prime: la batería externa que siempre llevo encima

Viajo mucho. Y cuando digo mucho, no me refiero solo a hacer una escapada de vez en cuando, sino a trayectos constantes entre ciudades, eventos, ruedas de prensa y aeropuertos donde cada enchufe se convierte en un pequeño tesoro. En ese contexto, descubrir la Anker Prime 27.650 mAh con 250W ha sido como encontrar un aliado silencioso que no solo está a la altura, sino que anticipa lo que necesito incluso antes de que lo piense.

Lo primero que impacta es su tamaño. No es la más compacta del mercado, pero transmite robustez sin ser un ladrillo. En la mochila no ocupa tanto como otras con menor capacidad, y el acabado mate, elegante y sobrio, da confianza. A mí, que siempre llevo el MacBook, un iPhone y un iPad en la mochila, me da una tranquilidad inmensa saber que puedo cargar los tres —al mismo tiempo— y aún me sobra energía.

Potencia real, no marketing

Una cosa es lo que prometen, otra lo que dan. La Anker Prime cumple. No sólo puede cargar un portátil a 140W por USB-C (lo he hecho varias veces con el MacBook sin notar que baje rendimiento), sino que además ofrece dos puertos USB-C y uno USB-A, algo que me permite cargar varios dispositivos a la vez sin comprometer velocidad. Hay días en los que conecto el Mac, el iPhone y unos auriculares, y todo carga de forma fluida.

Además, gracias a su pantalla inteligente, sabes en todo momento cuánta energía entra, cuánta sale y qué está ocurriendo con cada puerto. Para quienes, como yo, trabajamos muchas veces desde cualquier rincón del mundo con un punto WiFi, esto marca la diferencia.

Un compañero infalible para los que vivimos con el cargador en la cabeza

El verdadero valor de esta batería externa no es solo técnico., es emocional. No tener que estar pendiente de si el avión tendrá enchufe, si la sala de prensa tiene tomas libres o si el café donde te refugias para trabajar tiene algún enchufe bajo la mesa. Con la Anker Prime, me olvido de todo eso.

Además, pesa menos de lo que parece, y su construcción es sólida. No cruje, no se calienta en exceso y su carga se realiza tanto con una base dock que también permite usarla como centro de carga en casa como con las tomas superiores. La combinación entre movilidad y funcionalidad está muy bien resuelta.

¿Para quién es?

Si viajas, si trabajas desde cafeterías o aeropuertos, si usas un portátil con frecuencia fuera de casa, o si simplemente quieres tener el control sobre tus cargas sin depender de enchufes, esta batería externa es para ti. No es la más barata, pero la tranquilidad que me da no tiene precio.

Ya no la saco solo cuando me voy de viaje. La llevo también en escapadas, en la mochila, incluso a una reunión larga donde no quiero estar peleando por el alargador. Anker ha logrado hacer un producto que no solo cumple con lo prometido, sino que te hace preguntarte cómo vivías antes sin él. En Amazon su precio ha bajado a 149 €, y vale cada céntimo que cuesta.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *